CONOZCA A LOS FUNDADORES

NUESTRA HISTORIA

Matt y Marianne Spangler y sus 5 hijos son misioneros cristianos en Honduras. Son miembros de Freedom Life Christian Center en Christiana, PA y los fundadores de Legacy of Hope Foundation.

Matt y Marianne sintieron por primera vez la llamada a Honduras después de un viaje misionero familiar allí en 2008. En 2011, fundaron Legado de Esperanza, vendieron sus pertenencias y se mudaron a La Ceiba, Honduras en diciembre de ese año. Durante ese primer año se asociaron con Ministerios Visión Cristiana, una pequeña red de plantación de iglesias con sede cerca de la capital de Tegucigalpa, para iniciar una iglesia y acompañar el programa de alimentación en el pequeño pueblo de Cacao.

La plantación de la iglesia y el programa de alimentación comenzó en septiembre de 2012 con sólo 35 niños. Hoy en día la iglesia sirve a unas 150 personas cada semana a través de diversos servicios y programas de discipulado para todas las edades. El programa de alimentación en curso sirve a cerca de 100 niños dos veces por semana y está promoviendo un cambio positivo en Cacao. En el último año, también han incorporado oportunidades de microempresas para las mujeres de la iglesia.

En marzo de 2013, la familia Spangler se trasladó a Santa Rosa de Copán y comenzó el marco para comenzar a ministrar a los niños en crisis. Hoy en día, la Fundación Legado de Esperanza proporciona cuidado de crianza y de emergencia a los niños abandonados y en riesgo en la región ti-estado Occidental de Honduras. Casa de la Esperanza, su hogar de acogida de niños y hogar de transición para bebés y niños pequeños abandonados y en riesgo, está dirigido por Matt y Marianne y operado con la ayuda de sus 7 empleados hondureños. Es el único recurso de este tipo en el occidente de Honduras.

Su misión es ayudar a los niños a curarse y, finalmente, lograr la permanencia en un entorno familiar seguro y saludable. Creen firmemente que estos objetivos sólo pueden alcanzarse estableciendo programas de educación y acogida, arraigados en la iglesia local. Trabajan continuamente a nivel local y nacional para desarrollar normas y recursos para educar y formar a las futuras familias de acogida y a otras personas que trabajan en el ámbito de la acogida. Su visión para el futuro es seguir creciendo como una red orgánica de familias de acogida, levantada a través de las iglesias locales.

 

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